RAÚL PORTO CABRALES – ESPECIAL PARA PRIMERTIEMPO.CO
En el año de 1901 llegaron al desaparecido muelle de la “Machina” los primeros mercantes ingleses y, sus marineros aprovechaban el tiempo libre para salir a practicarlo a las arenas vecinas de Bocagrande.
Así se conoció el primer balón en la ciudad y al poco tiempo, “los estibadores criollos dominaban de vista como era el juego, ya que seguían paso a paso lo que hacían los británicos, de manera que retarlos solo fue un paso”, según declaraciones dadas por el inmortal IGAPÈ (nota del editor: Ignacio Amador De La Peña, mítico periodista deportivo y dirigente cartagenero) hace muchos años a este periodista.
Luego la práctica fue cuajando, coqueteó con la incipiente afición y terminó echando raíces a pesar de tantos enemigos gratuitos que se le cruzaron en el camino. En 1907 con el club deportivo Estrella Roja de El Cabrero, cobra actividad y empieza a rivalizar con el béisbol. A principios de 1915, la prensa describe el entusiasmo existente entre los jóvenes por el fútbol, hasta el punto que el diario El Porvenir publica con lujo de detalles los pormenores y reglas básicas para jugar este deporte.
Algunos colegios como La Salle y el San Pedro Claver, además de la Universidad de Cartagena, se toman la plaza de la Artillería para mostrar sus avances futbolísticos y tres años más tarde, en 1918, el balompié se convierte en rival incómodo del béisbol llegándole a disputar la primacía, mostrando acciones en el campo “Grau” fenómeno que se mantiene hasta finales de 1922, cuando por un llamado del alcalde, Rodrigo Sánchez, el béisbol se reorganiza y el fútbol pierde algo de interés. Fueron figuras destacadas en esa época el pariente Pedro Claver Cabrales, Armando Pomares – un deportista polifacético – y Guillermo De La Peña.
Pero cuatro años más tarde, un grupo de aficionados reviven el interés y conforman una liga de fútbol presidida por Alfredo De Zubiría el 4 de julio de 1926, organizando un torneo en el campo de “La Matuna” que afecta al béisbol y al boxeo, generándose una rivalidad entre los oncenos Universidad y Colombo Alemán, participando además los planteles San Pedro Claver, La Salle, Ricaurte, Bolívar, ABC, Regimiento Cartagena y Atlántico. La juventud cartagenera se identificaba plenamente con este deporte. También la energía futbolera se transmite a los municipios de Arenal y Arjona.
A raíz de la inasistencia del fútbol de Bolívar a los I Juegos Nacionales de 1928 en Cali por falta de dinero y quedarse listos para el viaje, el ambiente se enfría y prácticamente desaparece su actividad; hasta que retorna en 1937 a través de la Base Naval y se crea la primera liga oficial con Enrique Grau a la cabeza, cuando el Unión Cartagena – en una tibia mañana dominguera del 28 de marzo – derrota 3 goles a 1 en el estadio “La Cabaña” al equipo barranquillero Deportivo Español.
Eso levantó el entusiasmo que estaba dormido; y más tarde Igapé, Toño Pizza, José Manuel Zapata y Miguel Henríquez Castañeda, reorganizan la número cinco en 1940 y con ello la participación en los V Juegos Nacionales de 1941 en Bucaramanga.
Se arma un onceno que va con pretensiones de luchar por las posiciones de honor. Era la primera vez que a nivel nacional salía el fútbol cartagenero, con una nómina titular compuesta por Igapé, Pizza, Pomares, Diego León, Felipe Mendoza, Dagoberto Barbosa, Felipe Paz, Andrés Zamora, Alfonso Gómez, Juan Polo y Rodrigo Martínez. Al final ocuparon el quinto lugar, no sin antes oponer fuerte resistencia a sus rivales.
De ahí en adelante, el fútbol se apoderó del campo de “La Matuna” y rivalizó con el béisbol, llegándose a codear con barranquilleros y samarios. Ya en 1943 tenía cuatro categorías (mayores, segunda, tercera e infantil), con un total de 28 equipos y más de 400 jugadores.
Fue cuando ocurrió el famoso y simpático caso realizado por algunos seguidores del béisbol, de serruchar en una noche septembrina los verticales instalados en aquel campo, entre los cuales se encontraba el finado periodista Melanio Porto Ariza. Para que eso no ocurriera más, los amigos del fútbol instalaron postes metálicos.
Fue el fútbol el primer deporte en Bolívar que se organizó en diversos municipios diferentes a Cartagena, emergiendo así la actividad en Magangué, Zambrano, Mompós, San Juan, San Jacinto, El Carmen de Bolívar y Sincelejo. Dejó de ser planta exótica, a la que se miraba con desdén y por encima del hombro.
Publicado originalmente en el Diario La Verdad en 2011.
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