En el día internacional de la mujer, #PrimerTiempoCO resalta a la hincha más fiel de Real Cartagena: Dennis Osorio Betancourt, «la señora Dennis», una aficionada de setenta años que lleva más de treinta acompañando a su equipo del alma en el Jaime Morón León, celebrando y gritando sus goles, y llorando sus derrotas.
Junto al video que acompaña esta publicación, grabado en el previo del Real Cartagena 2-0 Boca de Cali del pasado domingo, a continuación, compartimos algunos apartes de un reportaje realizado a Dennis en mayo de 2022.
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Siempre con su camiseta de Real Cartagena, siempre en la tribuna occidental, sola o acompañada, Dennis Osorio Betancourt alienta a su equipo del alma hace treinta años. A sus casi 68 años, esta administradora y exsecretaria, dice que el equipo cartagenero es su vida.
Todos la quieren saludar, todos quieren fotos con ella. En el Jaime Morón León muchos la conocen, y ella se siente en su casa. Con su radio colgado en el cuello, saluda a todos los periodistas, de los cuales también se ha hecho amiga. Dennis es una de las hinchas más incondicionales de Real Cartagena, y le pide a Dios que le permita verlo campeón algún día.
«Tengo 67, casi 68 años, y ya perdí la cuenta de hace cuántos años vengo al estadio. Yo empecé a venir cuando se llamaba Pedro de Heredia, y llegó el Unión La Cartagenera a jugar aquí. Luego llegó Real Cartagena», cuenta Osorio. «Yo soy administradora, fui secretaria y trabajé mucho tiempo con salud pública, pero no me llegué a pensionar. Ahora vivo con mi hermana que enviudó, nos hacemos compañía. Pero mi vida es Real Cartagena».
Dennis afirma que le gusta mucho el fútbol, y todo el deporte en general, y por eso empezó a asistir al Jaime Morón en 1991. «Yo me sentaba abajo, pero luego empecé a sentarme con la barra Muralla Real, donde nos reuníamos un grupo grande, que lideraba un señor llamado Carlos que tocaba la trompeta. Al principio venía con un cuñado que me acompañaba porque le gustaba el equipo, pero luego empecé a venir con un grupo de amigas como de mi edad», relata.
Con esa barra, Dennis empezó a viajar por todo el país acompañando al onceno heroico en varias épocas. «Incluso cuando el equipo jugó como local en Sincelejo o en Magangué, ahí estaba yo», apunta.
«De esa barra han fallecido varios, el señor Carlos, entre otros, éramos muy unidos aunque recuerdo muy poco sus nombres. Varios también han dejado de venir por salud, hay una de las compañeras que ya no viene porque tiene problemas en una pierna. Yo le pido a Dios que no me deje tener ningún problema de salud para seguir viniendo al estadio, así me toque sentarme abajo».

Dennis no tiene hijos, y nunca se casó. «Tal vez eso me permitió tal vez seguir viniendo siempre al estadio, esta siempre ha sido mi diversión. Cuando en mi casa me ven rabiosa, enseguida saben que perdió Real», dice entre risas, al tiempo que cuenta que en su familia nunca le han prohibido asistir al estadio, a pesar de su edad. «El día que me digan que no puedo venir me vengo escondida», apunta con su carcajada sonora, muy familiar para sus compañeros de tribuna.
«¿Qué es Real Cartagena para usted?», le pregunto a Dennis mientras el equipo calienta en el costado sur de la cancha. «Real Cartagena es mi amor», no titubea para decir. «Yo peleo por mi equipo, puede haber otros a los que les vaya mejor, pero así esté en la B o en la C, yo sigo a mi Real Cartagena. Sueño con verlo campeón, y le pido a Dios que me dé esa satisfacción de llegar a verlo campeón».
Y es inevitable para Dennis remontarse al subtítulo de Los Heroicos en 2005, la mejor campaña histórica de la escuadra, en la que estuvo muy cerca de cumplir ese sueño de ser campeón. «Yo recuerdo mucho la final con el Deportivo Cali en el 2005, fuimos subcampeones, y allí estuvimos en Cali. ¿Que por qué no fue campeón? Ahí hubo algo… (risas)».
Ni los diez (N. del E.: ya son doce) años en la B, ni la pandemia que alejó por más de un año a los hinchas del Jaime Morón León, enfrió el amor de Dennis por su equipo. «Nunca he dejado de quererlo. No sabes cómo anhelaba que llegara nuevamente el momento de venir a ver a mi equipo del alma».
La gran mayoría de jugadores de Real Cartagena podrían ser nietos de Dennis. Por eso, con su tono de abuela, les quiso mandar un mensaje. «Yo le pido a los jugadores que suden la camiseta, que quieran mucho a esta afición, que nosotros los queremos mucho y hacemos esfuerzos por ellos, y que ojalá nos den la satisfacción de ser campeones», dijo.
«¿Y cómo ve al equipo este año?», le pregunto al terminar la entrevista. «Vamos a ser campeones este año, mi Dios nos lo va a dar», respondió.