Junior de Barranquilla comenzó a planear la temporada 2026 casi de inmediato tras conquistar su estrella número 11 en la Liga BetPlay II 2025. Con la defensa del título y la participación directa en la fase de grupos de la Copa Libertadores como principales objetivos, la dirigencia inició contactos para reforzar la nómina que estará a cargo del técnico Alfredo Arias.
En ese proceso, uno de los nombres que estuvo cerca de concretarse fue el del volante Jannenson Sarmiento, de 26 años, quien fue uno de los jugadores destacados de la campaña de Unión Magdalena. El futbolista, valorado en 900 mil euros según Transfermarkt, parecía encaminado a convertirse en refuerzo del conjunto rojiblanco, incluso por delante del interés mostrado por América de Cali.
Sin embargo, la negociación se detuvo de manera repentina y, de acuerdo con el propio Unión Magdalena, el traspaso se encuentra caído. La explicación llegó desde la dirigencia del club samario, a través de declaraciones de su máximo accionista, Eduardo Dávila.
“Me enteré que el señor Julio Comesaña como que metió la mano allá (negocio de Jannenson Sarmiento)”, afirmó Dávila en diálogo con Scoppetta Radio y TV. El dirigente fue más allá y agregó: “Como que le llenó la cabeza de cucarachas a Fuad (para no hacer el negocio)”.
Hasta el momento, Junior no se ha pronunciado oficialmente sobre estas afirmaciones ni sobre las razones internas que llevaron a frenar la operación. Lo cierto es que el mediocampista, cuya prioridad inicial era llegar al equipo barranquillero, deberá ahora evaluar otras opciones.
Entre ellas aparece la posibilidad de que América de Cali retome su interés, así como alternativas en el exterior, ya que Sarmiento también estaría en el radar del Torpedo de Rusia, club en el que militó anteriormente el colombiano Yeison Guzmán. Mientras tanto, Junior continúa ajustando su planificación deportiva de cara a un 2026 exigente, en el que la competencia local y el reto internacional marcarán el rumbo de sus decisiones en el mercado de fichajes.




