En la ya tradicional despedida del equipo en el aeropuerto Rafael Núñez, el gobernador de Bolívar y presidente (e) de Real Cartagena, Dumek Turbay, criticó duramente a Rodrigo Rendón, porque no pidió buenos árbitros ni garantías a la Dimayor en el compromiso que Real Cartagena venció 2-1 a Llaneros en la ida de la semifinal del torneo.
«Tengo una molestia muy grande con la familia Rendón, lo único que les pedía era defender el trabajo, el esfuerzo, el amor y la pasión de la hinchada. Y no puede ser que para el partido que necesitamos un árbitro de respeto no nos lo manden, así que ellos tienen que trabajar en eso para que el domingo no se repita la historia. El de Llaneros fue un árbitro timorato, joven y que nos hizo mucho daño, se pudo capotear el temporal, pero no es posible», dijo Turbay.
Respecto al viaje del equipo, dijo que se han contemplado todas las garantías para que estén cómodos, «estamos listos para la próxima batalla, se van con casi tres días de anticipación y le estamos entregando todas las garantías para que coman, duerman bien y se recuperen».
Aseguró también que el incentivo prometido a los jugadores sigue subiendo de etapa en etapa, «es como un Baloto», dijo al tiempo que puntualizó que no se le ha negado nada al equipo «para que solo piense en superar un partido que va a ser duro, ellos están tranquilos y me da mucha confianza que Ferreira esté en el grupo y pueda viajar con ellos».
Aunque mínima, aplaudió la ventaja que se consiguió en el Jaime Morón, «la ventaja es importante, ya hubiese querido Cúcuta vencer anoche a Leones, así que debemos concentrarnos y de nuestra parte se ha hecho todo para que ellos puedan clasificar».
Finalmente criticó duramente la cancha del estadio de Llaneros, el Manuel Calle Lombana de Villavicencio. «Que Llaneros no crea que porque juegan en esa cancha terrible que tienen, sintética, que es puro caucho, Real Cartagena se las pondrá fácil. Deberían ver una cancha sintética como la que hicimos en El Carmen, eso sí es una cancha», dijo.