Decir que Real Cartagena fracasó una vez más no es mentir ni exagerar: un equipo como el auriverde está obligado a pelear el ascenso, pero ya completa diez años consecutivos en la segunda división, sin siquiera pisar una final.
La meta es clara: ascender, y para eso había que clasificar a la final del primer semestre. Quedar eliminado, a falta de una fecha y jugando tan mal, es fracasar. En PrimerTiempo.CO analizamos siete claves que llevaron a Real Cartagena a dar al traste con las intenciones de ser protagonista en el torneo.
El bajo rendimiento de titulares indiscutidos
Este debía ser el semestre de la consolidación de Daniel Pedrozo y Deivi Barrios. Titulares indiscutidos a tan corta edad, habituales en todos los procesos de selecciones Colombia, estaban llamados a liderar la zaga cartagenera camino al ascenso. Sin embargo, su rendimiento estuvo por debajo de campañas anteriores, donde se destacaron por su actitud, su guapeza y su férrea marca. Los hinchas se quedaron esperando más de las dos «joyas a futuro» del onceno auriverde.
El mal remate de torneo de jugadores importantes
Sebastián Girado, José Enamorado y Léider Robledo como volantes ofensivos metían miedo. Era un trío que generaba un sinnúmero de opciones ofensivas que, aunque a vces no eran aprovechadas por los delanteros, ponían contra las cuerdas a los rivales. Real Cartagena se vio superior a los contrarios durante un gran tramo del torneo regular. Pero en las finales, el rendimiento mermó. Girado nunca pudo encontrar su nivel acostumbrado, Robledo se mostró errático y con poca claridad, y Enamorado volvió a ser el mismo jugador de la era Nilton Bernal que jugaba para él, y no para el colectivo.
La incapacidad de ganar en momentos definitivos
Real Cartagena necesitaba una victoria en la fecha 12 para clasificar con tres jornadas de anticipación, y perdió 5-0 ante Quindío. Real Cartagena necesitaba una victoria en la fecha 15 para clasificar como primero del todos contra todos y asegurar el punto invisible, y perdió en casa ante Valledupar. Real Cartagena necesitaba ganar en Tunja para ser líder de su grupo, y perdió ante Chicó. Real Cartagena necesitaba ganar para llegar con vida en la última fecha, y perdió en casa ante Leones. En los momentos definitivos, Los Heroicos se amilanaron, y fueron incapaces de ganar.
La salida, aún sin explicaciones, de Stiven Sánchez
De esas «cosas raras» que siempre suceden en Real Cartagena. Los Heroicos, con el ánimo arriba y la ilusión de su gente, esperaban el debut en cuadrangulares. Un día antes, Stiven Sánchez y su cuerpo técnico renuncian sin explicación aparente. Sendos comunicados del equipo y del extécnico que no decían absolutamente nada. Es la hora y nadie, ni el extécnico, ni los directivos, ni los jugadores explicaron qué carajos pasó. Nadie le dio la cara a la hinchada auriverde.
La improvisación con Óscar Passo, y sus malas decisiones
Óscar Passo es el gran sacrificado de este fracaso. Cumplía una gran campaña en la Supercopa FCF con el equipo sub-19, y los directivos lo tiraron a la candela, con menos de un día de anticipación de su primer partido. A Passo se le notó la inexperiencia, es un buen elemento para el futuro, pero aún no es su momento. La mala lectura de los partidos, sobre todo ante Chicó en Tunja y ante Leones en Cartagena, terminó de condenar a este equipo. Nunca sacó a un España que no le llegaba a los balones, en Tunja dejó a un Enamorado agotado en cancha teniendo aún dos cambios, y ante Leones, cuando el diez era el único al que se le caía una idea, lo sacó inexplicablemente. Ya dijo en rueda de prensa que se quiere quedar. Amanecerá y veremos.
La falta de actitud de algunos jugadores en el cuadrangular
La actitud de los jugadores fue irregular durante el cuadrangular. Vieron jugar a Llaneros en el 0-4 de la primera fecha, pero fueron a Itagüí y jugaron un partidazo con garra, ganas y pundonor. Ante Chicó en el Morón, mostraron un buen juego ante le entregaron el balón al rival en el segundo tiempo, pero en Tunja aguantaron lo que pudieron, y luego dieron evidentes muestras de cansancio. Este jueves ante Leones en casa, se vio un equipo sin ánimo, pálido, casi entregado. Le negaron sudor a la camiseta, y no correspondieron al aliento de los hinchas.
El pésimo rendimiento como local
No se puede pretender tener éxito sin ganar como local. A Real Cartagena lo metió entre los ocho su buena campaña de visitante en el torneo regular, la misma que se esfumó en el cuadrangular. Pero un equipo que gana apenas 3 de 10 partidos como local, está condenado a fracasar. No es posible ceder tantos puntos en tu feudo, y Real perdió tres juegos y empató cuatro. Así era muy difícil.