A ritmo de jazz, del 27 al 31 de agosto en Cartagena, se celebrará en el Festival Voces del Jazz los cien años del natalicio de Alejandro Durán Díaz, una de las grandes leyendas y figuras emblemáticas del folclor vallenato. La celebración se hará en el marco del tradicional concurso del evento que llega a su séptima edición en 2019.
“En esta edición hemos escogido al maestro Alejandro Durán para sumarnos a los diferentes reconocimientos que el país le hace en los cien años de su nacimiento. “Voces del jazz” tiene dentro de sus objetivos, el de acercar los sonidos de nuestra música vernácula al jazz. Es por eso que en ediciones anteriores la música de Lucho Bermúdez, José Barros, entre otros, han sido interpretadas desde el jazz como un homenaje que hacen las nuevas generaciones a los grandes maestros de nuestra música colombiana”, afirma Manuel Reyes, uno de los organizadores.
“Voces del jazz y del Caribe” es un festival que convoca las nuevas bandas de jazz del país y del mundo a un concurso donde es obligatorio, para participar, adaptar una de las obras del homenajeado.
El evento, que cuenta con el apoyo y organización del Centro Comercial Caribe Plaza, la Universidad de Cartagena y su emisora UdeC Radio abre hoy su convocatoria y la cierra el 30 de junio.
La selección de participantes se realizará del 30 de junio al 6 de julio. Y la publicación de bandas seleccionadas se hará el 8 de julio en las redes sociales del Festival.
Los interesados pueden bajar los requisitos del concurso en el Facebook Voces del jazz, escribir solicitando la información a vocesdeljazzfest@hotmail.com, o llamar al 3013339111.
El concurso entrega premios en efectivo a las siguientes categorías Mejor banda de jazz, primer lugar; Mejor banda de jazz, segundo lugar; Mejor banda de jazz, tercer lugar; Mejor arreglo o composición de jazz en homenaje a Alejo Durán y Mejor solista, primer y segundo lugar (vocalista o instrumentista).
Alejandro Duran “rompió con todos los esquemas establecidos en una sociedad feudal como la nuestra, que no le daba chance a las muestras campesinas para ser escuchadas. Es un gigante que cantó con voz sonora de negro rebelde y que de manera genial se hacia la segunda voz con su inseparable instrumento. Nació en El Paso, un enclave cimarrón que entre tambores y acordeones fue signando su vida, para lo que habría de ser: un artista con todas las de la ley.
“El 9 de febrero de 1919 nació para el mundo de la música y el 15 de noviembre de 1989 se despidió en Montería del mundo de los vivos de manera silenciosa como lo hizo siempre”: tomado de diario El Espectador de “Historias vallenatas, Alejandro Durán, un cimarrón inolvidable” de Félix Carrillo Hinojosa, escritor periodista y gestor cultural.
Dentro de sus obras más destacadas de están Fidelina, Altos del Rosario, 039, Guepajé, Pobrecito corazón, Los campanales, Este Pobre Corazón, El bautismo, El Compromiso, Los Lentes, La Puya Vallenata, Mi Folclor, Carmencita, Besito Cortao, A dónde estará Durán, El Adivino, A mi Pueblo, Qué tienen las mujeres, Las Viejas no me quieren y Ceja Encontrada, entre otras.