Notablemente molesto. Así salió de la cancha del Estadio Metropolitano de Itagüí el técnico de Real Cartagena, Stiven Sánchez, tras la derrota 3-2 de Los Heroicos caminando la cancha ante Leones. Y notablemente molesto acudió el profe a la rueda de prensa, donde cuestionó la actitud de varios de sus jugadores en la cancha, y afirmó que el equipo se vio «sin deseo, sin ganas» y que «pareciera que no entrenáramos».
«Empezamos con unas ganas y un deseo en los primeros partidos que nos llevó a conseguir los resultados, pero en el momento en que tuvimos que pelear por algo importante, se notó la inexperiencia y quizá la calidad de algunos de los jugadores, contra rivales importantes y jugadores de peso», explicó Sánchez.
«Siempre voy a muerte con mis jugadores, pero es indudable que en los últimos dos juegos veo un equipo sin deseo, sin ganas. Pareciera que no trabajáramos, cuando nosotros preparamos cada sesión. Duele ver la actitud de algunos jugadores, porque no son todos. Vamos a replantear muchas cosas, al final la B es un torneo competitivo, y hay que tener jugadores que compitan la B», sentenció el estratega paisa.
El entrenador de Real Cartagena afirmó que le gusta competir y no «estar por participar», y que jamás salió de su mente el deseo de ascender. «Duele, porque yo me evalúo pero evalúo el grupo. Siempre respaldo al jugador a muerte pero es imposible que en estos últimos dos partidos se vean un equipo desdibujado, que parece que no entrenara, cuando es lo contrario. Hay que tocarnos todos, los jugadores también tienen que hacer su balance, y competir porque en la B aparte de jugar bien, también hay que competir», sostuvo.
Sánchez también explicó por qué sacó a José David Enamorado en el minuto 31 del primer tiempo. «Estábamos sufriendo sin balón, José estaba aportando poco en la fase defensiva, y cuando tenía la pelota que es lo más importante que él tiene y lo que más nos aporta, tomaba malas decisiones, cinco o seis balones perdidos por él, erráticos en el último tercio. Teníamos que cerrar un poco más la mitad, y él era el jugador que estaba pasando por un nivel más bajo», concluyó.