Tras el empate 2-2 ante Unión Magdalena, Alberto Suárez, técnico de Real Cartagena, afirmó que al equipo le faltó tranquilidad y madurez en la primera línea. Señaló que no ganar, después de ir 2-0 arriba, lo dejó intranquilo, y aceptó que los cambios que hizo no salieron bien. Suárez explicó que sacó a los dos volantes de primera línea, Becerra y Torres, para prevenir el riesgo de quedarse con uno menos, y defendió la actuación de Barrios y Franco, quienes ingresaron por ellos.
EL BALANCE DEL PARTIDO. «Nos faltó un poquito de tranquilidad y madurez ahí en la zona de volantes de primera línea, y entender que el 2-1 era un muy buen resultado para llevarnos de acá. Tuvimos el 3-1 y el 4-1, y creo que volvimos a fallar ahí a la hora de cerrar el juego. Pero hay que darle el crédito a Unión, hizo muchas cosas buenas, desde sus posibilidades, después de la para, al punto de que veníamos comentando con el capitán, si dura tres minutos más el partido, lo podemos perder».
UN PARTIDO MUY ATROPELLADO. «Fue un juego válido, de dos equipos que tienen ambición de ascenso. No me voy tranquilo porque haciendo dos goles por delante, de visitante, en teoría debería ganarse. Pero estuvo muy atropellado el partido, casi toda la defensa con amarilla, era asumir muchos riesgos y yo prefiero no asumirlos. Desafortunadamente no supimos manejar la situación por inmadurez, hicimos los méritos para llevarnos los tres puntos, pero Unión hizo méritos para empatar».
LOS CAMBIOS DE BECERRA Y TORRES. «Vi la necesidad de cambiar los dos volantes, no porque jugaran mal. Estaban jugando muy bien, estaban dándole el equilibrio que el equipo necesitaba, pero los dos tenían amarilla y asumían muchos riesgos para la expulsión. Podrían estar diciéndome ahora “por qué no sacó los volantes si tenían amarilla y se hicieron expulsar”. Ese riesgo no tenía por qué asumirlo innecesariamente. Barrios ha demostrado que lo sabe hacer, Franco ha demostrado que lo sabe hacer. Les costó el ingreso en los primeros minutos y el Unión sacó ventaja. Pero siento que era necesario cuidar el juego, e infortunadamente no salió».
LAS AMARILLAS CONDICIONARON EL PARTIDO. «Regularmente, yo no saco un jugador con amarilla por sacarlo, pero hoy era asumir muchos riesgos. Ellos estaban nerviosos, metían el pie mal o no lo metían por el mismo tema, la amarilla. Estamos enfrentando a un rival complejo que hace los méritos desde lo futbolístico para conseguir cosas, teníamos que ser responsables y desde el banco intentamos ser responsables. Después del partido, es fácil el análisis, el problema era hacerlo ahí en una situación compleja que teníamos, porque no era solamente los dos volantes de marca. El lateral izquierdo y Palomeque también tenían amarilla, era todo un costado del campo con amarilla. Había que defenderlo con agresividad y para eso, había que tener por lo menos a favor el reglamento. Lo que pasa es que en la primera acción le sacaron amarilla a Barrios y volvió el sufrimiento».
LA DEFENSA DE FRANCO Y BARRIOS. «Cuando se tranquilizaron, hicieron un buen juego, tuvimos un par de ocasiones de gol que salieron desde esa zona. Los goles del empate no vienen por culpa de ellos. Hoy no salieron los cambios, sobre todo esos dos, pero otras veces han salido y ese es el juego».
LA SITUACIÓN DE LAS BARRAS. «Con respeto lo digo, lo de las barras no se puede justificar, llámese la barra del que sea, eso no se puede justificar. Uno no puede venir al estadio a matarse. Por el lado mío pasó un hombre apuñalado, eso no puede pasar. El fútbol es para divertirse o sufrirlo, pero después tiene que pasar».
LOS POCOS MINUTOS DE SANDOVAL. «Lo del “Chino” es normal, lo tenemos planificado así, que entrara unos minutos para que, en la medida que pasan los días, se vaya adaptando al equipo y el equipo a él, y vaya adquiriendo el nivel físico, técnico, táctico, para que juegue».


