En un partido tosco y complicado tácticamente, Real Cartagena consiguió su primera victoria en el Torneo Águila 2019 tras vencer a Tigres FC, por 2-0, con goles de Nelson Barahona y Henry Castillo, en el estadio Jaime Morón, por la tercera fecha del certamen de la segunda división en Colombia.
Real Cartagena arrancó enchufado. La pelota rodaba en el mediocampo y acababa en los pies de Jhony Cano, que no escatimaba recursos para desbordar y darle amplitud y altura al ataque del conjunto auriverde.
El equipo cartagenero concretó dos oportunidades en los primero dos minutos. Primero, Jean Pineda se proyectó y disparó desde la puerta del área. En segunda instancia, el volante Jefferson Rentería por poco anota en contra de su arco tras un centro al corazón del área de Jhonny Cano.
Las condiciones del partido cambiaron luego de los 10 minutos de partido. Real Cartagena bajó su ritmo de juego. El vértigo inicial fue aplacado por el orden táctico de Tigres, que copaba el mediocampo con tres hombres en la mitad y dos jugadores abiertos por los costados, que tapaban la subida de González y Moreno.
Cartagena empezó a dividir la pelota y comenzó a depender de sus individualidades. En cambio Tigres, con menos argumentos, cortaba líneas de pase en zona dos y ralentizaba el juego en ofensiva de los Heroicos.
Sobre los 30 minutos de partido, luego de un largo tramo de partido sin actividad
es en las áreas, Real Cartagena rompió el celofán. Elvis González robó la pelota en campo contrario, asistió a Jean Pineda que encaró a dos rivales e hizo todo para aclarar el camino al gol: pausa, media vuelta y pase a Nelson Barahona, quien de media distancia desenfundó y venció la resistencia del portero Romaña, de Tigres, y poner el 1-0.
En el cierre de la primera mitad, los dirigidos por Richard Parra dominaron el balón y administraron la diferencia.
Para el segundo tiempo, Real Cartagena cedió el protagonismo a Tigres FC. El heroico no tenía profundidad en sus ataques y no construía cadenas de pases.
Los minutos pasaban y Tigres buscaba una oportunidad para igualar la acciones.
Al minuto 70 de partido se vivieron momentos de tensión en el estadio Jaime Morón por una jugada fortuita donde salió mal librado el centro John Lozano, del cuadro ‘auriverde’, quien recibió una dura patada en su rostro y se desplomó sobre la grama, inconsciente y convulsionando. Fue necesaria la intervención de los equipos de la Cruz Roja y paramédicos para estabilizar al jugador y trasladarlo a centro asistencial más cercano.
Como consecuencia, Tigres FC se quedó con un hombre menos por la expulsión de Juan Sinisterra. Luego de lo sucedido, el impacto anímico hizo mella en los dos equipos, que bajaron sustancialmente el ritmo y restó vértigo al compromiso.
Mientras transcurría el minuto 87, Robert Harrys aprovechó una desatención defensiva para robar el balón en zona dos del campo contrario, se quitó al último hombre en la defensa y asistió a Henry Castillo, quien ingresó en la segunda parte, para ampliar la diferencia y liquidar el compromiso, por 2-0.
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