Real Cartagena cedió gran porcentaje de su aspiración de llegar a la final del Torneo BetPlay y cayó en el estadio Jaime Morón León 2 goles por 1 ante Fortaleza. Lo que pintaba con ser una fiesta, convocó a casi 8.000 personas en el ‘nido amarillo’. Pero todo se trastocó y la noche terminó en una vergüenza absoluta con invasión de cancha y agresión de jugadores.
José Ampudia abrió el marcador para la visita al minuto 30, con un remate de media distancia que se le coló entre las manos a Sebastián Duque. Apenas cuatro minutos después, Navarro amplió la ventaja para Fortaleza, también con complicidad de Duque, y allí sobrevino el caos.
Los espectadores apostados en la tribuna sur, con la barra Rebelión Auriverde Norte, invadieron el terreno de juego antes que se reanudaran las acciones, increparon a los jugadores del equipo heroico, agredieron al portero Duque y provocaron la suspensión del juego. Cuando todo parecía que esto terminaría en los escritorios, el publicó abandonó el Morón e increíblemente, la DIMAYOR decidió continuar a puerta cerrada.
Tras la reanudación, Real Cartagena controló gran parte del segundo tiempo pero continuó sufriendo en la definición. Faltando 10 minutos para el final, el juez Camilo Colmenares sancionó una pena máxima a favor de Real Cartagena, Santiago Gómez se hizo cargo y anotó el descuento, con un remate a la base del palo izquierdo, el portero Castillo casi lo atrapa, pero se terminó colando.
Fortaleza aguantó bien el resultado y se llevó medio tiquete para la final, ya que le sacó 6 puntos a Boca de Cali y 4 a Real Cartagena, dejando casi en la lona al equipo heroico.
En la retina del país futbolero quedará la invasión del terreno de juego, en un acto bochornoso que mancha a la ciudad y al fútbol nacional. Por otro lado, la derrota también deja en evidencia la profunda reestructuración en todos los niveles que necesita Real Cartagena, sumido en el sótano del último infierno de Dante desde hace 12 años.
Real Cartagena visitará a este mismo rival el próximo martes 31 de octubre, y queda a la expectativa de la casi segura sanción que recibirá la plaza tras los reprochables hechos de invasión de cancha. Todo se jodió, no hay nada que salvar, nuevamente Real Cartagena es la vergüenza del fútbol nacional.
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