Por: Jonathan Jiménez Hernández – Especial PrimerTiempo.CO
“¿Ajá y tú qué?”, fue una de las preguntas que le lanzó un periodista en plena rueda de prensa al técnico antioqueño Hernán Darío Herrera cuando llegó por primera vez a la ciudad ‘Heroica’ en el año 1999, dando entrever que el adiestrador paisa no era el indicado para dirigir al club.
Pero como dice el viejo adagio no hay nada que dé más revancha que el fútbol y el ‘Arriero’, como también se le conoce a Hernán Darío Herrera, junto a jóvenes con ganas de triunfar le terminaron dando el anhelado ascenso al Real Cartagena en ese mismo año y se convertiría en el técnico más histórico del conjunto ‘auriverde’. La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, dice una famosa canción de Willie Colón.
En el año 2004 este director técnico volvió a tierras cartageneras para volver a ascender al equipo en el año 2004 y luego se convertiría en el técnico más histórico del club, ya que ha sido el único en llevar a Real Cartagena a disputar una final en el fútbol profesional colombiano, no solo eso, se convirtió en el primer entrenador en ascender y en el año siguiente llegar a una finalísima en primera división. Un crack.
Hoy el técnico antioqueño, como ha sido característico en su personalidad, luce tranquilo y de pocas palabras, eso sí, recuerda entre risas que después de lograr su primer ascenso le contrapreguntó al mismo periodista “¿Ajá y tú qué?», y este quedó en silencio absoluto.
En la actualidad, el entrenador oriundo de Angelópolis, Antioquia, se desempeña como director técnico de las divisiones menores de Atlético Nacional, donde ha logrado coronarse como campeón con las categorías juvenil, prejuvenil y sub-20, además de tener diferentes reconocimientos en torneos de Liga y campeonatos nacionales.
Periodista (P.): ¿Cómo se da su llegada a Real Cartagena?
Hernán Darío Herrera (H.D.): Cuando yo llegué la primera vez a Real Cartagena vine con un equipo del América, todos eran jugadores del club que estaban iniciándose. Muy jovencitos. En equipo estaban los Asprilla, Jorge Banguero, David Ferreira que se convirtió en un jugador fundamental para nosotros. Allí fue donde ascendimos.
Nosotros nos manteníamos entrenando en la playa, porque en Cartagena no había canchas, en ese tiempo yo le dije al preparador físico que nos fuéramos a entrenar a las canchas de softbol en un espacio reducido. Eso era una verraquera, quité la playa y ese equipo se fue derecho y ascendimos.
Recuerdo mucho que en ese año nadie creía en nosotros, quizá era por la forma en que habíamos llegado, jugadores muy jóvenes y yo tenía procesos pero en divisiones menores.
Yo llego al plantel porque el dueño de ese momento de Real Cartagena, el Capitán Galindo, junto con Javier Pombo y Mauricio Idárraga me llamaron para que me desplazara a la ciudad. Me fui y reitero, fue muy curioso porque nadie creía en nuestro proceso, pero a final de año le terminamos dando el ascenso al Cartagena.
Luego el equipo se mantuvo unos años en la primera división, pero infortunadamente volvió a descender, sin embargo regresé a la ciudad y volví a ascender al Real.
P.: ¿Hábleme de ese segundo ascenso con el equipo cartagenero en 2004?
H.D.: Cuando yo llego en ese año no me acuerdo si el técnico que estaba era la Gambeta Estrada. Yo volví y le ganamos a Deportivo Antioquia 3-0 en Cartagena
Antes de eso le ganamos a Valledupar 0-5 allá. En ese tiempo decían que en 5 minutos se hicieron 5 goles y eso era mentiras. Se hicieron los goles en 10 minutos que fue lo normal en un equipo desesperado como lo era como Valledupar que quería empatar y atacar y nosotros en el contragolpe fuimos muy certeros.
En ese año teníamos un equipo conformado con grandes jugadores como Roberto Camargo, Sandro Zuluaga, Jefferson Torres, entre otros. El plantel de aquel entonces era muy rápido adelante y si nos daban la oportunidad de hacer goles nosotros lo hacíamos.
P.: Y después llega el subcampeonato en el 2005, evento histórico en Cartagena ¿no?
H.D.: Yo creo que lo del año 2005 fue una historia muy bonita para nosotros, para la ciudad, porque uno ascender dos veces al equipo y después sacarlo subcampeón disputando la final contra el Deportivo Cali donde no se esperaba llegar hasta allá.
Los que estuvimos en ese momento creo que pasamos a la historia de Cartagena y se lo merecía la afición, la ciudad y los jugadores. Recuerdo cuando le ganamos a Santa fe en el último minuto, creo que la gente creía mucho en el equipo y en el tiempo que estuvimos allá la gente nos acompañó mucho, hicimos una afición que es la que tiene Real Cartagena ahora.

P.: ¿Qué pasa en la final frente a Deportivo Cali?
H.D.: Cali fue superior en todo, nosotros tuvimos muchos inconvenientes de nómina al final y el equipo caleño era un conjunto grande que nos superó de visitante y de local. Lo importante de todo esto fue que un equipo chico llegó a disputarle la final con un equipo grande.
P.: Después de ese subcampeonato se va para el América, ¿por qué no siguió en el plantel?
H.D.: Nosotros pasamos, la instituciones siguen y en ese tiempo no logramos acordar con las directivas del equipo y me fui a dirigir al América 3 meses, el Real en ese tiempo se fue para Sincelejo, Sucre y bueno son gajes del oficio.
P.: En ese mismo año usted vuelve al estadio donde cosechó dos ascensos y un subtítulo, pero ahora dirigiendo al Bucaramanga, ese día usted salió aplaudido del estadio ¿Lo recuerda?
H.D.: Yo tengo que agradecerle mucho a la hinchada, por ejemplo a la Rebelión Auriverde creo que la hicimos nosotros. Me siento orgulloso de que esa afición surgió en la época de nosotros, en aquel entonces esos jóvenes estaban pequeños y ahora hay gente muy experimentada en eso de las barras. Tengo muchos recuerdos bonitos de esta hinchada.
P.: Vuelve en el 2007 tratando de salvar al plantel del descenso, pero esta vez no se pudo ¿Qué pasó?
H.D.: Lo agarré a lo último y traté de ir a salvar de nuevo al equipo, pero era difícil porque el modelo de ese Real Cartagena no lo había armado yo. La verdad fueron complejos esos partidos finales porque hice todo lo posible por levantar al equipo, pero lamentablemente no se pudo.
En ese año les dimos la oportunidad a muchos jugadores cartageneros como Ayron del Valle, a quien pusimos a debutar, Marcos Canchila, Alexander Anaya, José Nájera, entre otros. Es decir, el jugador cartagenero tuvo continuidad, no como dicen por ahí que no se le dio la oportunidad al jugador de esa ciudad y se sacaron buenos jugadores.
P.: Profe hábleme un poco de la historia de la virgen que estaba ubicada en la tribuna sur del Antiguo Pedro de Heredia. ¿Cuál es la historia?
H.D.: Esa virgen siempre estuvo allí, lo que pasa es que la quitaron y no sé por qué. Uno cree en la fe y en agradecimiento al ascenso que conseguimos el grupo que logró esto, porque ojo, no fue Hernán Darío Herrera, fuimos todos los que logramos ascender y entre todos mandamos a poner esa virgen en la tribuna, lástima que de un momento a otro la tumbaron, cada uno tiene sus creencias, nosotros tenemos la de nosotros. Eso sí, si yo algún día vuelvo a Cartagena mando a poner ese altar en la tribuna.
P.: Usted tuvo a Hubert Boderth como su asistente técnico, ¿cómo fue el trabajo con él?
H.D.: Cuando llegué en el 2007 ya Boderth estaba allí y los directivos me dijeron que si él podía ser el asistente mío y yo les dije que no tenía ningún problema. Allí se le abrió un camino y afortunadamente para él va muy bien y Dios quiera que pueda seguir triunfando.
P.: A propósito del profe Boderth, ¿Qué opinión le merece el tener tantos técnicos extranjero en nuestra liga?
H.D.: Es muy preocupante porque si te pones a ver las finales del fútbol colombiano solo hay 3 técnicos nacionales que son Hubert Boderth, Alberto Gamero y Diego Corredor. Hay que hacer fuerza, uno siempre que le vaya bien a los del país, pero usted sabe que llegan técnicos muy capacitados como es el caso del entrenador de Atlético Nacional, el mismo Julio Avelino Comesaña que lleva mucho tiempo acá. Pero si te soy sincero es muy preocupante lo que está pasando con los entrenadores del fútbol colombiano.
P.: ¿Le gustaría dirigir en el profesionalismo o se quiere quedar de lleno con los jóvenes?
H.D.: Si se me da la oportunidad volvería a dirigir en el profesionalismo, hoy nosotros estamos capacitándonos más y con mejor preparación. Espero volver a ser entrenador de un equipo profesional y ¿por qué no? Algún día quiero regresar a Real Cartagena, vamos a ver cuándo se da esa oportunidad.
P.: ¿No ha vuelto a tener contactos con el club?
H.D.: Para nada he tenido contacto con ellos, después que salí del plantel no volví a tener contacto con ninguno de ellos.
P.: ¿Sigue a Real Cartagena?
H.D.: Sí, siempre sigo lo que pasa con el equipo, me meto a las páginas de Real Cartagena y a la de la Rebelión Auriverde. Es decir, siempre estoy pendiente del Real.
Porque a decir verdad, yo me siento muy orgulloso de tener un nombre en Cartagena y tener un reconocimiento y no se puede olvidar la gente que le dio mucho a uno, en este caso la gente de Cartagena.
P.: ¿Qué es lo que más recuerda la ‘Heroica’?
H.D.: Todo, los triunfos que conseguimos allá, a Margarita la del kiosko fuera del estadio, a Pedro Sierra, a mucha gente de allá, los ascensos y los homenajes que nos hicieron.
Recuerdo mucho la champeta, ir de Bocagrande a Bazurto, pasar por el mercado, ir al estadio y meterme por todos los barrios de Cartagena. La verdad disfrute mucho de mi estadía en Cartagena.
P.: El equipo está enfermo, se encuentra en uno de sus peores momentos. ¿Qué mensaje le mandaría a la afición?
H.D.: El equipo está en una dificultad hay que tratar de que todos se unan para que Real Cartagena vuelva a competir en la máxima división. A este equipo lo hace su gente, tiene una hinchada que no se puede perder.
Cuando yo llegué la primera vez se dio una unión muy fuerte, compañerismo, hubo apoyo de la afición y del periodismo deportivo todos nos apoyamos y ascendimos. Aunque al principio nos fue mal y no ganábamos casi, pero después nos disparamos y subimos.
P.: Definitivamente usted es muy recordado en Cartagena, profe…
H.D.: Uno pasa a la historia y me siento muy orgulloso de haber estado en el Real, porque fueron dos ascensos y un subcampeonato y la historia que se hizo allá le abrió un camino a los jugadores de la ciudad. Yo me siento muy orgulloso con el grupo de trabajo y todos los que estuvimos en el Real Cartagena y como te dije anteriormente ojalá algún día pueda volver.