![]() |
Foto: Colprensa |
En el Panamericano de Patinaje
de Velocidad en Buga, Valle del Cauca, por Colombia hay una deportista que se
roba las miradas: la bolivarense Yersy Puello, que en 28 años de edad completa
la misma cantidad de títulos mundiales, y va por más. Estas sus anécdotas, las
enseñanzas y sus sueños por cumplir.
de Velocidad en Buga, Valle del Cauca, por Colombia hay una deportista que se
roba las miradas: la bolivarense Yersy Puello, que en 28 años de edad completa
la misma cantidad de títulos mundiales, y va por más. Estas sus anécdotas, las
enseñanzas y sus sueños por cumplir.
En medio de las terribles
crisis de asma que sufría cuando niña, nadie, ni siquiera el más testarudo de
los adivinos, se hubiera atrevido a predecir lo que pasaría en el futuro con
Yersy Puello en el deporte.
crisis de asma que sufría cuando niña, nadie, ni siquiera el más testarudo de
los adivinos, se hubiera atrevido a predecir lo que pasaría en el futuro con
Yersy Puello en el deporte.
“Esa niña se va a morir un día
de estos”, decían algunos vecinos, cuando sus padres tenían que salir corriendo
con la muchachita para el hospital, casi que ahogada, jadeante y tosiendo sin
parar.
de estos”, decían algunos vecinos, cuando sus padres tenían que salir corriendo
con la muchachita para el hospital, casi que ahogada, jadeante y tosiendo sin
parar.
Pero hubo algo peor. Ante los
consejos médicos de que la llevaran a nadar en piscina como la ayuda más
efectiva para superar su mal, los padres hicieron el esfuerzo y la llevaban.
Pero ella le tenía miedo al agua y, en vez de meterse, lo que hacía era darle
vueltas a la piscina caminando por el cemento. Así parecía imposible.
consejos médicos de que la llevaran a nadar en piscina como la ayuda más
efectiva para superar su mal, los padres hicieron el esfuerzo y la llevaban.
Pero ella le tenía miedo al agua y, en vez de meterse, lo que hacía era darle
vueltas a la piscina caminando por el cemento. Así parecía imposible.
¿Entonces cómo fue que esta
mujer, no solo superó su enfermedad sino que llegó al deporte y hoy ha ganado
la friolera de 28 títulos del mundo en el patinaje y espera ganar más? Ella,
sonriente, aceptó contarnos su historia.
mujer, no solo superó su enfermedad sino que llegó al deporte y hoy ha ganado
la friolera de 28 títulos del mundo en el patinaje y espera ganar más? Ella,
sonriente, aceptó contarnos su historia.
“Yo nací en el barrio San
Fernando de Cartagena. Mi padre fue estudiador de suelos y mi madre ama de
casa. Desde muy niña fui asmática y, más o menos, hasta los seis años no salía
del hospital. Eran muchas las crisis que me daban y, de la semana, yo me pasaba
tres y hasta cuatro días en el hospital. De ahí que yo no haya sido una niña
como las demás. Yo no supe qué era jugar corriendo en la calle con otros niños
porque siempre me tenían como aislada. Hasta que por fin llegué al deporte. A
los 11 años llegué al patinaje, gracias al apoyo de mis padres, quienes en una
Navidad me regalaron unos patines. Me los puse sin miedo y sin temores en la
calle, la cual habían pavimentado por esos días. Mi papá me vio y, de una,
descubrió que yo podía tener un futuro en ese deporte. Algunos amigos le decían
que me llevara a artístico, pero a él le gustaba era que yo me rozara con gente
y me matriculó en la escuela de iniciación Pegasos Élite de Bolívar. Ahí
comencé, ya a los 12 años, mi carrera deportiva. Pero tengo que confesar que yo
iba porque ellos me llevaban porque, la verdad, a mí no me gustaba, no me
gustaba ninguna clase de deportes. Yo lo que quería era estudiar.
Fernando de Cartagena. Mi padre fue estudiador de suelos y mi madre ama de
casa. Desde muy niña fui asmática y, más o menos, hasta los seis años no salía
del hospital. Eran muchas las crisis que me daban y, de la semana, yo me pasaba
tres y hasta cuatro días en el hospital. De ahí que yo no haya sido una niña
como las demás. Yo no supe qué era jugar corriendo en la calle con otros niños
porque siempre me tenían como aislada. Hasta que por fin llegué al deporte. A
los 11 años llegué al patinaje, gracias al apoyo de mis padres, quienes en una
Navidad me regalaron unos patines. Me los puse sin miedo y sin temores en la
calle, la cual habían pavimentado por esos días. Mi papá me vio y, de una,
descubrió que yo podía tener un futuro en ese deporte. Algunos amigos le decían
que me llevara a artístico, pero a él le gustaba era que yo me rozara con gente
y me matriculó en la escuela de iniciación Pegasos Élite de Bolívar. Ahí
comencé, ya a los 12 años, mi carrera deportiva. Pero tengo que confesar que yo
iba porque ellos me llevaban porque, la verdad, a mí no me gustaba, no me
gustaba ninguna clase de deportes. Yo lo que quería era estudiar.
“Pero ya cuando ya gané mi
primera medalla, recuerdo que fue en un Nacional en Bucaramanga en pre juvenil,
comencé a cogerle un poco de amor y a entrenarlo mucho más seguido.
Inicialmente me llevaron a natación, pero no me gustaba. Me llevaban a las
clases pero yo lo que hacía era dar vueltas alrededor de la piscina y nunca me
metí. Después de una semana de estar haciendo lo mismo, mi mamá se aburrió y
dijo que no me volvía a llevar.
primera medalla, recuerdo que fue en un Nacional en Bucaramanga en pre juvenil,
comencé a cogerle un poco de amor y a entrenarlo mucho más seguido.
Inicialmente me llevaron a natación, pero no me gustaba. Me llevaban a las
clases pero yo lo que hacía era dar vueltas alrededor de la piscina y nunca me
metí. Después de una semana de estar haciendo lo mismo, mi mamá se aburrió y
dijo que no me volvía a llevar.
![]() |
Foto: ElColombiano.com |
“Lo del patinaje casi que fue
a la brava, porque en mi casa se hacía lo que mi papá dijera y él dijo que iba
a patinar. Yo recuerdo que un da mi papá no me podía llevar y entonces mi mamá
me montó a un bus para que él me
recibiera en la India Catalina. Yo me fui en el bus, pero me quedé dormida y
cuando desperté ya el bus había dado la vuelta y estaba de nuevo en mi barrio,
cerca de mi casa. Casi se vuelven locos buscándome….
a la brava, porque en mi casa se hacía lo que mi papá dijera y él dijo que iba
a patinar. Yo recuerdo que un da mi papá no me podía llevar y entonces mi mamá
me montó a un bus para que él me
recibiera en la India Catalina. Yo me fui en el bus, pero me quedé dormida y
cuando desperté ya el bus había dado la vuelta y estaba de nuevo en mi barrio,
cerca de mi casa. Casi se vuelven locos buscándome….
“Cuando subí a la categoría
Pre Juvenil me di cuenta que podía ser alguien grande en este deporte, porque
me gané cinco de siete medallas posibles en mi primer torneo en Bucaramanga.
Eso me llenó de entusiasmo y, además, siendo pre juvenil me invitaron al
Selectivo y ya vi cómo era que se debía entrenar al cien por ciento para ser
alguien en esto. Ya con mi entrenador, Ever Paola, decidimos planificar el
entrenamiento y dedicarnos a la velocidad. Gracias a Dios pudimos salir
adelante.
Pre Juvenil me di cuenta que podía ser alguien grande en este deporte, porque
me gané cinco de siete medallas posibles en mi primer torneo en Bucaramanga.
Eso me llenó de entusiasmo y, además, siendo pre juvenil me invitaron al
Selectivo y ya vi cómo era que se debía entrenar al cien por ciento para ser
alguien en esto. Ya con mi entrenador, Ever Paola, decidimos planificar el
entrenamiento y dedicarnos a la velocidad. Gracias a Dios pudimos salir
adelante.
“Ahora tengo que decir que el
deporte lo ha sido todo para mí, que mi vida ha ido evolucionando y he cambiado
mucho. Al principio me sirvió para saber que no solo debía ser una buena
estudiante, sino que tenía que prepararme para ser una buena deportista
también. Yo creo que esa es la clase de maduración que uno tiene en este
deporte. Yo soy muy apegada a mi entrenador y a mi familia y entonces he
sentido como ese apoyo y, la verdad, es que me siento muy cobijada por ellos.
deporte lo ha sido todo para mí, que mi vida ha ido evolucionando y he cambiado
mucho. Al principio me sirvió para saber que no solo debía ser una buena
estudiante, sino que tenía que prepararme para ser una buena deportista
también. Yo creo que esa es la clase de maduración que uno tiene en este
deporte. Yo soy muy apegada a mi entrenador y a mi familia y entonces he
sentido como ese apoyo y, la verdad, es que me siento muy cobijada por ellos.
“Lo de mis 28 títulos
mundiales es una gran emoción. Ser la mujer con más títulos del mundo es algo
que no me lo imaginaba, pero sí lo quería. Yo siempre quise ser la mejor,
superar a grandes deportistas para quedar en la historia del deporte. Cada uno
de mis 28 títulos representa algo muy importante en cada capítulo de mi vida.
Cada uno lo luché al máximo, me han insultado y tratado de perjudicar, porque
en esto hay muchas envidias, especialmente cuando uno está creciendo, pero a mí
eso no me ha limitado para seguir demostrando lo que valgo y siempre he dado lo
mejor de mí.
mundiales es una gran emoción. Ser la mujer con más títulos del mundo es algo
que no me lo imaginaba, pero sí lo quería. Yo siempre quise ser la mejor,
superar a grandes deportistas para quedar en la historia del deporte. Cada uno
de mis 28 títulos representa algo muy importante en cada capítulo de mi vida.
Cada uno lo luché al máximo, me han insultado y tratado de perjudicar, porque
en esto hay muchas envidias, especialmente cuando uno está creciendo, pero a mí
eso no me ha limitado para seguir demostrando lo que valgo y siempre he dado lo
mejor de mí.
“Ahora muchos me preguntan si
después de haber ganado 28 títulos quiero ganar más y mi respuesta siempre es
que sí. Quiero llegar a los 30 y desde hace un año, más o menos, me he enfocado
en ese objetivo. Pero no soy yo quien va a decir si me retiro hoy o mañana, eso
solo lo decide Dios, pero mientras pueda voy a seguir luchando para lograr esa
meta. Eso sí, el día que Dios me diga, no más, hasta aquí, lo voy a tomar con
la mejor actitud y me iré”.
después de haber ganado 28 títulos quiero ganar más y mi respuesta siempre es
que sí. Quiero llegar a los 30 y desde hace un año, más o menos, me he enfocado
en ese objetivo. Pero no soy yo quien va a decir si me retiro hoy o mañana, eso
solo lo decide Dios, pero mientras pueda voy a seguir luchando para lograr esa
meta. Eso sí, el día que Dios me diga, no más, hasta aquí, lo voy a tomar con
la mejor actitud y me iré”.
Después de esta gran
confesión, no nos queda sino preguntarle cómo, después de ganar 28 títulos del
mundo, afronta un Panamericano como el que se inicia este jueves acá en Buga:
confesión, no nos queda sino preguntarle cómo, después de ganar 28 títulos del
mundo, afronta un Panamericano como el que se inicia este jueves acá en Buga:
“Con la misma madurez con que
tomo un Mundial. Para mí este es un evento muy importante porque aquí, aunque
somos la potencia americana, no la vamos a tener fácil, y por eso voy a salir a
la pista con la misma madurez con que fui al mundial de la China hace poco.
Vamos a respetar a cada uno de los rivales, porque tenemos claro que todos van
a ir en contra de Colombia, pero nosotros siempre nos enfocamos en ser los
mejores y quedar de primeros”.
tomo un Mundial. Para mí este es un evento muy importante porque aquí, aunque
somos la potencia americana, no la vamos a tener fácil, y por eso voy a salir a
la pista con la misma madurez con que fui al mundial de la China hace poco.
Vamos a respetar a cada uno de los rivales, porque tenemos claro que todos van
a ir en contra de Colombia, pero nosotros siempre nos enfocamos en ser los
mejores y quedar de primeros”.
Y para finalizar, Yersy nos
habla de cómo es su vida hoy, en Cartagena y al lado de sus padres: “Cuando
estuve en Cali estudié Gastronomía y ya tengo esa carrera en mi poder. Ahora en
Cartagena llevo dos semestres de Pedagogía Infantil, lo que no ha sido fácil
por estar metida en el deporte. Vivo con mis padres y una hermana. Estoy
dedicada cien por ciento al patinaje y me tocó cancelar el semestre por la
permanecía en la Selección. No puedo negar que en el patinaje me ha ido bien.
Con este deporte he conseguido muchas cosas, tengo mi casa, mi carro, soy la
mano derecha de mi familia y quien aporta casi todo. También tengo por ahí un
lote y estoy pensando en conseguir un apartamento para tenerlo en arriendo.
Como pueden ver, el patinaje me ha dado muchas cositas”.
habla de cómo es su vida hoy, en Cartagena y al lado de sus padres: “Cuando
estuve en Cali estudié Gastronomía y ya tengo esa carrera en mi poder. Ahora en
Cartagena llevo dos semestres de Pedagogía Infantil, lo que no ha sido fácil
por estar metida en el deporte. Vivo con mis padres y una hermana. Estoy
dedicada cien por ciento al patinaje y me tocó cancelar el semestre por la
permanecía en la Selección. No puedo negar que en el patinaje me ha ido bien.
Con este deporte he conseguido muchas cosas, tengo mi casa, mi carro, soy la
mano derecha de mi familia y quien aporta casi todo. También tengo por ahí un
lote y estoy pensando en conseguir un apartamento para tenerlo en arriendo.
Como pueden ver, el patinaje me ha dado muchas cositas”.
REDACCIÓN
FEDEPATIN NACIONAL
FEDEPATIN NACIONAL
PRIMERTIEMPO.CO