Los Cachorros estaban 4-1 abajo, después se pusieron 8-4 al frente y 9-6 en un juego que duró más de 4 horas y media y terminó pasada la medianoche del jueves al viernes. Al final, terminaron venciendo 9-8 a los Nacionales de Washington, con Davis ponchando en el último out del último inning al siempre temible Bryce Harper. Y por tercer año consecutivo, Chicago luchará por el campeonato de la Liga Nacional.
El arjonero José Quintana, quien lanzó joya de pitcheo en el tercero de la serie y salió sin decisión, apareció por decisión del mánager Joe Maddon en el séptimo inning, cuando los Nacionales fueron descontando de una en una, y anotaron una carrera empujada por un elevado de Bryce Harper ante Quintana. Quedaron dos en base con dos outs, pero Davis inició su largo relevo, y ponchó a Zimmerman y se conjuró la amenaza.
La victoria se la acreditó Brian Duensing, segundo de los siete lanzadores usados por los Cachorros, con salvamento para Davis (0-3), mientras la derrota la encajó Max Scherzer en función de relevo. Fue la cuarta victoria consecutiva de los Cachorros en un juego que debían ganar para evitar la eliminación en postemporada. Eso incluye tres al final de la Serie Mundial de 2016, cuando Chicago perdía 3-1 ante los Indios de Cleveland antes de forzar un séptimo juego que los Cachorros ganaron en 10 innings.
Los Cachorros, campeones defensores, enfrentarán por segundo año seguido a los Dodgers en la final liguera, que definirá al representante de la Nacional en la Serie Mundial. El otro boleto al Clásico de octubre se lo disputan en la Liga Americana los Astros de Houston y los Yankees de Nueva York.