Un nuevo rifirrafe se registró entre los institutos de deporte del departamento y del distrito. En un cruce de acusaciones, el gerente de IDERBOL Ariel Zambrano Meza y la directora del IDER, Viviana Londoño, se enfrentaron abiertamente: la falta de trabajo mancomunado de cara a los Juegos Nacionales, y unas inversiones para mejorar el estado actual del Coliseo Bernardo Caraballo, propiedad del Distrito pero administrado por el Departamento, encendieron la polémica.
Este martes, en la emisora La Reina, el gerente de Instituto de deportes de Bolívar IDERBOL, Ariel Zambrano Meza, afirmó que el ente rector del deporte en el Distrito de Cartagena, IDER, no ha querido “trabajar de la mano” y que “son muchas las talanqueras que se han presentado” por parte de esa entidad distrital.
La directora del instituto, Viviana Londoño, respondió al funcionario departamental expresando su “sorpresa y extrañeza por la repentina, injustificada y beligerante, pero inconsistente arremetida mediática en contra del IDER”, y afirmando que las declaraciones de Zambrano están llenas de “imprecisiones, falsedades y verdades a medias”.
Lo que afirma Zambrano, gerente de IDERBOL, es que el IDER “ha pasado tres años y cinco meses trabajando con retrovisor y el deporte de Cartagena está estancado”, e hizo énfasis en que desde el Distrito no se ha trabajado mancomunadamente de cara a los Juegos Nacionales 2023.
Ante esto, la directora del IDER sostuvo que, con respecto al trabajo articulado de ambas entidades de cara a Juegos Nacionales, IDER asignó apoyos a 60 deportistas por $432 millones, y se entregarán otros $288 millones a 40 atletas más.
El gerente de IDERBOL se refirió además al hecho de que Corsarios, equipo profesional de baloncesto, no pudiera jugar en la casa habitual de este deporte que es el Coliseo Bernardo Caraballo porque, según él, “IDER no permite que se realice la inversión al escenario sino se les hacen cumplir las pólizas a los anteriores contratistas, lo que dilataría la adecuación”.
El Coliseo Cubierto Bernardo Cabarallo, ubicado en el Paseo Bolívar, es un escenario propiedad del Distrito de Cartagena, pero administrado hace más de veinte años por la Gobernación de Bolívar a través de IDERBOL, por medio de un comodato vigente hasta el 31 de diciembre de 2024, “en calidad de préstamo de uso y goce gratuito para el desarrollo de actividades comunitarias deportivas”.
Londoño afirmó que conoció de forma verbal las intenciones de Zambrano de invertir “una cantidad indeterminada de recursos en el Coliseo”, por lo que, como propietarios del predio, el IDER solicitó formalmente la presentación de ese proyecto que, según ella, “no ha sido presentado a la fecha”.
Apunta el IDER que, según el comodato, cualquier mejora o adaptación locativa “que implique la ejecución de obras civiles en el escenario debe ser autorizadas por el IDER”.
La directora del IDER calificó de infundadas las afirmaciones de Zambrano acerca de que su instituto habría impedido las refacciones: “escapa a nuestro interés sugerir como el ente departamental debe manejar los recursos públicos”, apuntó.
Zambrano también apuntó que “el comodato se ha cumplido a cabalidad y hoy el IDER, dueño de los predios, se ha dedicado a cuestionar su mantenimiento, teniendo escenarios que sí necesitan inspección e intervención en la ciudad de Cartagena y los corregimientos”.
Sin embargo, según Londoño, el IDER ha recibido quejas de deportistas “sobre el estado de deterioro que presentan algunas áreas de ese escenario deportivo, a pesar de la aparente inversión realizada por $826 millones en 2022, y cuyo informe final de ejecuciones aún no ha sido presentado al IDER”, acotó.
Zambrano Meza reveló que IDERBOL explora alternativas legales para devolver el escenario a su propietario, a lo que Londoño ripostó que su instituto “estará presto a recibir y revisar la solicitud formal que se presente en tal sentido, y procederá de conformidad a lo estipulado en las cláusulas del correspondiente contrato y en la Ley”.